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lunes, 30 de abril de 2012

El otro lobo




Mas allá de los títulos profesionales en las personas hay algo mas que debemos apreciar.

Mucha gente se confunde con personas que han calado interesantes puestos, pero cuando analizas sus vidas no es mucho lo que pueden aportar como personas. Los confundidos y sin personalidad los sigue como la gran cosa y le dan la importancia que no merecen. Los escuchan atentos como si fueran dioses y no son mas que demagogos. 

Es triste verlos, es triste tratarlos, es como si consiguieron lo que tienen por una necesidad de protagonismo.

Ver estas personas tratando de llamar siempre la atención, porque sienten que ignoran su capacidad es deprimente.

Son esas personas que lo complican todo en el mundo, porque se sienten víctimas y no entiendes la felicidad de aquellos que no tienen nada.

No solo el lobo está en el cuento de caperucita roja, está en el mundo en donde los demás son sus presas.


"La demagogia en su sentido más simple es decirle a la gente lo que quiere oír, con el fin de obtener de ellos el consentimiento para hacer lo que se proponga convenciéndolos que hacen lo correcto y que están ejerciendo el control de sus vidas"